Eric del Castillo se accidentó en grabación de novela

Eric del Castillo compartió en entrevista para el periodista Edén Dorantes que sufrió un accidente mientras grababan una escena de la novela Vivir de amor que actualmente se transmite por Las estrellas.

“De la pared se cayó un cuadro que me golpeó en la mano”

El actor de 89 años, da vida a Emilio Rivero Cuéllar en la trama y relató cómo fue que se vio involucrado en este incidente mientras grababan una escena de pelea entre los personajes interpretados por Emmanuel Palomares y Juan Diego Covarrubias.

“Se estaban peleando los dos galanes, de repente pegaron en la pared y de la pared se cayó un cuadro que me golpeó en la mano. Fue hace una semana y me atendieron de inmediato los paramédicos de Televisa, son gajes del oficio, en el cine me di cada catorrazo que esto no fue nada,” relató don Eric del Castillo

“Se espantaron porque me salió un chorro de sangre”, les pregunte: “No se me cayó el dedo, ¿verdad?”

Tras golpear su mano, le provoco una herida que de inmediato comenzó a sangrar. “Se espantaron porque me salió un chorro de sangre”, pese al susto, don Eric no perdió su sentido del humor y les preguntó a sus compañeros que estaban más espantados que él: “No se me cayó el dedo, ¿verdad?”, causando la risa de los presentes.

Afortunadamente todo quedo en el susto, ya que sólo fue el golpe y no requirió que tuvieran que suturarle la mano. Cabe destacar que, con la edad, la piel del humano se va haciendo muy delgada, por lo cual, un fuerte golpe puede ocasionar una herida muy fácilmente.

“Tuve un personaje central en la historia y eso cansa un poquito por los llamados, pero estoy feliz”

Tras finalizar las grabaciones de este melodrama, don Eric del Castillo tomará un descanso: “esta novela fue muy pesada para mi porque tuve mucho trabajo, afortunadamente tuve un personaje central en la historia y eso cansa un poquito por los llamados, pero feliz.”

El actor se siente satisfecho con su desempeño: “ya terminamos, es otra aventura porque todo personaje son aventuras y luego es muy triste porque uno se preocupa por fabricar un personaje, por hacerlo valer y luego ni siquiera se despide de uno el personaje, sé larga y ni da las gracias.”